LA FUERZA: ÚNICA CUALIDAD FÍSICA.

No he podido resistirme. En este primer post he querido escribir sobre algo que me apasiona: el entrenamiento de la fuerza.
Cuando estudiamos las cualidades físicas básicas (fuerza, velocidad, resistencia y flexibilidad) nos olvidamos de algo básico: al analizar una realidad, al desmenuzarla, podemos perder su esencia. Eso ocurre con el movimiento humano. El músculo, generador de movimiento, puede ser más o menos rápido, más o menos resistente, más o menos flexible (o mejor dicho, elástico). Por lo tanto, si queremos mejorar cualitativamente el movimiento humano, además del trabajo de coordinación o técnico, hay que trabajar el músculo, hay que trabajar la fuerza. Una fuerza más o menos rápida, más o menos resistente, más o menos elástica (en el concepto de flexibilidad también entran variables relacionadas con la movilidad articular).

Dicho lo anterior, también hay que tener en cuenta la realidad del tipo de movimiento. ¿Cómo son los movimientos de la mayoría de los deportes? ¡Rápidos! La diferencia la marca la velocidad, o en algunos casos, los más, la repetición de movimientos rápidos. Por lo tanto deberemos entrenar la resistencia a la fuerza rápida (que no la fuerza resistencia).
He aquí uno de los pilares fundamentales del entrenamiento deportivo y que muchas veces se pasa por alto. Si obviamos el entrenamiento de la fuerza y de su componente más veloz, estaremos construyendo deportistas “trotones” y descoordinados muscularmente, lo que les llevará a ser poco eficientes y predispuestos a la lesión muscular.

Quizás haya reducido demasiado la realidad, pero creo que debe ser el principio, es mi opinión.

Si os interesa, insistiremos en este tema.

8 comentarios