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| El humor forma parte de la búsqueda. |
El título es muy sugerente y
amplio. Si lo relacionamos con el mundo del deporte podríamos pensar en la
lesión de un deportista, en la vuelta de una situación económica “estable” que
permita hacer crecer (o mantenerse) a proyectos deportivos… o simplemente
esperar a que cambien algunas cosas. Hoy el post es cortito.
En la vida como en el
deporte (que listos estos del Colacao) hay que levantarse cuando te caes, hay
que pelear por conseguir aquello que anhelas. Si por algo nos caracterizamos
los deportistas es por esa capacidad de superación, de lucha.
Cuando piensas en la frase
que da título al post de hoy, personalmente, pienso en un tren que avanza, que entra en un túnel y
que antes o después, en función de la longitud de dicho túnel, acaba saliendo a
la luz. Pero todos nosotros cuando hemos montado en tren hemos sido pasajeros y
he ahí el matiz más importante de tan gráfica frase. En nuestras vidas no somos
pasajeros, somos maquinistas y por lo tanto podemos y tenemos que coger los
mandos (¿tienen volante los trenes?) con fuerza y responsabilizarnos de lo que
ocurra.
No podemos dejar en manos de
los demás o de la suerte nuestro futuro. Cuando la luz falta, lejos de contener
la respiración hay que buscar claridad en la oscuridad.
Cuando un deportista se
lesiona durante su etapa de formación, ponerse en manos de BUENOS profesionales
y manejar los tiempos con paciencia.
Cuando un deportista en lo
mejor de su carrera se lesiona, saber que la lesión forma parte de su carrera y
aprovechar para trabajar sus puntos débiles y también… tener paciencia.
Cuando un deportista en el
ocaso de su carrera se lesiona y el túnel es largo, saber cambiar de tren, no
sea que su destino no sea el esperado.
Cuando a un entrenador no le
van las cosas como esperaba, agarrar los mandos con fuerza, tener paciencia,
mantenerse firme y tomar decisiones.
Cuando los resultados no
acompañan, analizar el panel de control y en ningún caso parar la locomotora.
En la vida se entra
constantemente en túneles de los que se sale mejor o peor en función, entre
otras cosas, de si te consideras pasajero o maquinista.
Un saludo y mucho ánimo a
los lesionados, a los que no acompañan los resultados, a los que dudan, a los
que aún no ven la luz…con la gorra de maquinista llegaréis más lejos que los
pasajeros de primera.
Que paséis un buen verano.
Es opinión, espero vuestros
comentarios (y/o experiencias).
Imagen: somos.vicencianos.org
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