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El inspector, un visionario |
Algunas veces me he preguntado porque no han vuelto a poner en la tele
aquella serie de dibujos animados, El Inspector Gadget. Aquel gracioso
personaje, que no daba una pero solucionaba los casos, nos acompañó durante
algunas temporadas sin saber que la “palabreja” iba a volver a nuestro día a
día.
Hace ya algún tiempo que venimos hablando en este blog sobre la necesidad
de que la población sepa gestionar sus hábitos saludables. Una manera de
gestionar esos hábitos tiene que ver con las nuevas tecnologías, porque no.
Si unimos esa necesidad de saber autogestionarnos con el boom del deporte
popular, ese control y autogestión se hace casi obligatorio, máxime por las
consecuencias que puede acarrear una mala práctica.
A veces da pánico, sí pánico, ver gente corriendo por el parque, subiendo
un puerto un domingo por la mañana… “coloraos” como cangrejos, por encima, sin
duda, de intensidades dentro de rangos saludables. Por no hablar del
momento de la llegada en algunas pruebas de carácter popular…
Sin embargo, muchas veces nos quedamos en la sofisticación por la
sofisticación. Está muy bien ir con tu smartphone por el parque para saber los
kilómetros que has hecho, el desnivel acumulado, el tiempo invertido por
kilómetro… ¿Y? ¿Para qué nos sirve eso? un montón de “coloricos” que dirían los
aragoneses, sin ningún tipo de validez real. O sí, la de vacilar con los
“colegas”.
Tenemos a nuestro alcance un montón de tecnología que nos puede hacer
mejorar nuestras prestaciones durante el entrenamiento, que nos puede ayudar a
controlarlo, que nos puede decir cuales son nuestras intensidades óptimas…. y
nos quedamos en los “coloricos”...
Básculas que infieren nuestro porcentaje graso, electroestimuladores para
mejorar los niveles de fuerza, geoposicionadores, pulsómetros, podómetros…
¡¡incluso la wii!!, apps, software de entrenamiento virtual, de control de
entrenamiento… Y algunos de ellos “de marca” (anda que no saben… y hacen bien).
Prioricemos. Desde mi punto de vista, imprescindible el pulsómetro, siempre que en el deporte practicado se ponga el corazón a altas pulsaciones durante largos periodos. El
resto de "cacharros"… prescindibles. Como complemento se pueden utilizar apps (sobre todo para
cuantificar la carga en volumen e intensidad) pero si nuestro corazón va
desbocado… la práctica saludable se habrá convertido en justo lo contrario. De
básculas y electroestimuladores... hablamos otro día.
Pero, siempre hay un pero, las herramientas informáticas y los gadgets no
pueden “suplantar” a la “masa gris”. Así tenemos el mercado lleno de consejos genéricos
que también pueden convertirse en un problema. Cierto es que la inteligencia
artificial va sofisticándose y ya podemos encontrar propuestas sobre práctica
física que se pueden acercar a las necesidades de los ciudadanos. Aunque la
sensación (más que una sensación es una convicción) que tengo es que, cuanto
más específico es el entrenamiento más se necesita la materia gris. No es lo
mismo una gimnasia de mantenimiento que el entrenamiento de Usaín Bolt. Aunque
"casi" todo se andará. Estoy seguro.
En cualquier caso, hazte un reconocimiento médico deportivo al menos cada
dos años, contrólate el ritmo cardiaco y como siempre, ponte en manos de
profesionales.
Es opinión, espero vuestros comentarios.
Foto:
http://blogs.lasprovincias.es/elsindromededarrin/2013/03/21/el-inspector-gadget-se-adelanto-a-su-tiempo/
Pues sí, Marcos, puede que consecuencia de la sociedad de consumo o porque nos sentimos más confiados con esos cacharritos, están sobredimensionándose. Pero como todo, bien utilizados son útiles. Reconozco que yo he sido de los que he acudo en el exceso. Un buen ordenador de muñeca de excelente diseño me acompaña pero por que se adapta a todos los deportes que práctico por la cantidad de parámetros configurables que tiene! me gusta conocer y comparar mi estado y mi rendimiento. Eso sí, mi gadget imprescindible es el MP3.
ResponderEliminarPor cierto, te has olvidado de la Teletienda, todos esos aparatos milagrosos que sin esfuerzo nos convierten en organismos perfectos.
Saludos y ánimo
Es cierto que estamos inundados de aparatos y apps, pero es más cierto que con un objetivo más comercial que práctico y creo que están dirigidos a gente semiprofesional o amateur cuyo nivel de conocimiento profundo no es exhaustivo. Estos aparatos sólo da información, números, cifras, porcentajes, etc. Pero lo importante no son las cifras sino ¿qué hacer con ellas?. Sin el análisis, la manipulacion, la evaluación de esas cifras se quedan en eso, números carentes de sentido. Y ese análisis sólo lo pueden realizar los expertos.
ResponderEliminarEs como tener un aparato que te da la temperatura: tú recibes un número medidos en grados, pero quien decíde cuándo quitarte la ropa y cuánta quitarte o cuándo beber agua y cuánta, eres tú y el análisis que hagas de esos datos. Y eso no lo hace ningún aparato o apps.
me quedo en especial con esta frase: " las herramientas informáticas y los gadgets no pueden “suplantar” a la “masa gris”
ResponderEliminarGran verdad,pues con cabeza usarás cualquier herramienta de un modo adecuado.
Un saludo, Ruth
Totalmente de acuerdo las herramientas son justo eso "herramientas" y deberían estar monitorizadas por la cabeza o/y un profesional, en mi empresa nos dedicamos al desarrollo de estos productos, siempre pensando en dar información al
ResponderEliminarProfesional para que pueda tener información y optimizar los entrenamientos, conocéis Seego seego.realtracksystems.com
Saludos!
Las Apps para entrenamiento son muy útiles para los deportistas que se inician y para todos aquellos que prefieren tener un "refuerzo externo". Es conveniente pero, que estén supervisados por un responsable para ajustar el rango adecuado de práctica en los niveles de edad, salud y entrenamiento. Robert
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